sábado, 1 de diciembre de 2012

Vnedo sueños, ¿quieres uno?





Todos en la vida hemos tenido algún que otro sueño que hemos querido repetir o que se hiciese realidad, yo por ejemplo si lo he tenido y más de una vez he deseado que fuese verdad. Y ahora yo me pregunto : ¿cómo sería el poder comprar ese sueño y manipularlo a voluntad?, fijo que el ser humano lo acabaría destrozando ya que somos así... bueno ahora pongámonos a imaginar e imaginemonos la situación:

Nos encontramos en una calle comercial en la cual hay un extraño puesto con un hombre que levanta muchas sospechas. Nadie se atreve acercarle ni preguntarle que venden, solo en sus mesas se ve sobres cerrados con sellos raros. Nuestro protagonista al ver toda esa extrañeza se decide acercar y preguntar que vende:

Protagonista: Buenas tardes señor, ¿que se supone que vende?
Tendero: Buenas tardes caballero, vendo sueños
P: ¿Como dices?
T: Sueños caballero, ha oído bien
P: Pero, ¿es posible venderlo?
T: Todo es posible, ¿por que no me compra uno y lo compruebas?
P: No se no se, debería pensarlo muy detenidamente
T: ¿Nunca ha tenido un sueño que quisiese repetir o hacer realidad?
P: La verdad que si...
T: Dígamelo y ¡que se haga realidad!
P: Quiero... quiero una vida perfecta, con todo lo que he deseado siempre
T: Sabes, se lo puedo dar, pero no es un sueño muy recomendable... perdería mucho, créame.
P: No tengo mucho que perder pero con mi vida perfecta tengo mucho que ganar sabe usted
T: ¿Quiere perder los sentimientos? porque una vez perfecto no te hacen falta, las emociones...
P: Quiero ese sueño y lo quiero ya... así que dámelo...
T: Se lo venderé, pero la mayoría de la gente que ha pedido ese deseo...ha perdido toda cordura con la realidad ya que se pierde en el mismo sueño... y aunque yo pregoné que te hago realidad un sueño siempre tiene que tener en cuenta que sigue siendo un sueño y detrás del sueño se puede esconder la más tenebrosa pesadilla... aún así ¿lo sigues queriendo?
P: Por supuesto, ya me da igual todo, si al menos puedo morir siendo feliz por unos instantes de mi vida, porque no haciendo mi mayor sueño realidad, ¿no?
T: Vale... abra este sobre... y que sea feliz....

Y he aquí el puro egoísmo y destrucción del humano en tanto a ciertos temas de la vida, todo puede ser muy bonito al igual que destructible, lo más frágil puede ser hasta lo más fuerte... bueno que el humano ante tentaciones no reacciona nunca bien...



Alina~

domingo, 18 de noviembre de 2012

No sé






No se como empezó todo,
Algo nuevo que contar,
Brechas nuevas hechas por la guillotina del alma,
Heridas que cicatrizan a un ritmo lento,
Lágrimas pasadas que no se olvidan,
Llantos de verdadero dolor,
Sufrimientos no debidos..

Que mas decir después de una mala vida
De cosas que tal vez te arrepientes y de cosas que no
Que mas oír de gente que no conoces que te miran por encima
Que hablares de no entender

Ya no se que hacer,todo cambia pero para que lado...
Tu mundo de fantasía desaparece,único rincón del cual eras el amo
Ya ni sientes la bomba de deseos que había dentro de ti que te hacia mover
Solo te queda una solución y es la de dejar que esa cosa que te mancha por dentro salga y que te deje libre de este mal final..

Todo tiene final y que acabe como uno quiere es improbable pero mejor eso que una dura eternidad de solo compasión menta..



Alina~

viernes, 2 de noviembre de 2012






Miedo: Sentimiento de terror que siente el humano ante muchas situaciones de la vida. También puede llegar a convertirse en grandes problemas este sentimiento porque no te deja avanzar en la vida y acabas con ella……..

ACTO PRIMERO: RECHAZO

Quieres y no puedes, temes a que te miren y se rían de ti, eres débil para aguantar esas situaciones. Nunca haces nada por intentar conseguir lo que quieres y te acabas quejando, te dan ánimos y sigues sin hacer nada, no quieres que te rechacen ya que has fracasado mucho en esta vida. Sabes lo que te depara el futuro y lo aceptas como si tal cosa… tienes que cambiar de pensamientos.

Llega el día de la verdad, vistes en un sueño a la sombra que tanto quieres conocer y esta noche sabes que la veras en carne y hueso, piensas que va siendo hora de superar tu miedo, la moral te sube, piensas todo el día que lo vas hacer que lo vas hacer… llega la noche y ves a la sombra de tus sueños, piensas que es preciosa y te acercas… el miedo te sigue apoderando, quieres dejarlo pero tampoco quieres defraudar a los que te dieron ánimos… haces el acercamiento y… el miedo se ha apoderado de ti, ves que todo el mundo te observa, las palabras no salen de tu boca como tú esperabas, estas quieto, sudando de miedo, la tienes enfrente, el local te observa atentamente y llega la primera risa, te señalen y se ríen, ahora eres la atracción principal del lugar, no sabes que hacer, en tu mente solo se te pasa la palabra LLORAR, quieres hacerlo pero si lo haces ya no podrás volver, es una gran humillación, aprietas los puños y… te das media vuelta y sales del circulo de gente y del lugar, desapareces bajo el manto de oscuridad de la noche, sabes que has defraudado a los que te animaban y a ti mismo, ya has perdido toda confianza que decides…

ACTO SEGUNDO: SOLEDAD

Paseas por la calle y rodeado de gente, gente desconocida para ti, piensas que realmente no estas solo pero en verdad si lo estás. Tus amigos pasaron de ti hace tiempo, decían que no eras nada, te dejaron de hacer caso y ahora estas solo, solo físico y mental, aunque siempre piensas que estas rodeado de gente pero son desconocidos. Intentas hacer acercamientos para poder tener amigos nuevos y pasan de ti, la soledad te puede, no sabes que hacer, llegas a casa y sigues solo, no hay nadie, empiezas a desesperarte, coges el ordenador, entras en el chat y sigues solo, todos pasan de ti, simplemente eres otro pesado más, nadie quiere saber nada de ti, llevas la estigma de condena en el cuello y todos te han fichado y están de acuerdo de que estés solo, la sociedad da asco y lo sabes pero no puedes vivir sin ella, crees que deberías cambiar para poder entrar en la sociedad pero sabes que si lo haces perderás tus ideales y no serás diferente, porque quieres ser diferente a ellos, así que decides que pase el tiempo y que ya llegara buenos tiempos y acabas diciendo que la soledad ya se pasara…

ACTO TERCERO: OSCURIDAD

Pasas el día en la calle, te diviertes bajo la luz del sol, cuando miras el reloj y ves que va siendo tarde, quieres irte ya pero te retienen, ella va a llegar pronto y lo sabes pero los que te retienen no saben de tu pelea con ella, te inventas una excusa de peso y te vas. Llegas a casa y sabes que por hoy te has librado del grande pero que en tu casa también reside ese gran miedo que sientes, nada más cerrar los ojos está ahí. Temes a cerrarlos, temes a avanzar por él, piensas que es como la muerte, negra como la túnica de la muerte y afilada por el viento que produce como el filo de la guadaña de la muerte. No sabes que hacer, ya se esta metiendo en tu casa, empiezas a encender las luces pero estas desaparecen, los plomos se han fundido, estas en absoluta oscuridad, te caes al suelo, eres débil para esto, empiezas a gritar, no eres capaz de llegar a los plomos y encenderlos, solo puedes hacerte una bolita tirada en el suelo y gritar, las lágrimas te empiezan a saltar cuando escuchas el ruido del viento, el miedo se ha apoderado de ti. Gritas y gritas creyendo que la oscuridad te va absorber y no vas a volver más. Sigues gritando y llorando, estas cayendo poco a poco en la locura, empiezas a perder la cordura, cierras los ojos y lo ves, ves a lo que tú una vez vistes, a la muerte, esta loca, ya no te queda nada de cordura, te levantas y deja que te absorba tu mayor miedo…

ACTO CUARTO: CLAUSTROFOBIA

Rodeado siempre, no se separan de ti, no sabes salir de allí, todo se reduce y se acerca más a ti, estas sudando del pánico, gritas y gritas más y más fuerte, te dejas los pulmones para que nadie te oiga, nadie ira a tu rescate, sigues gritando pero todo se va acercando más rápido hasta tal punto que llegas a poner las manos en las dos paredes laterales, sigues gritando, te estas quedando sin aliento, empiezas ha enloquecer, se acercan a todo prisa, tienes que agacharte ya porque el techo ya casi te a pillado, sigues gritando pero ya afónico, gritas y gritas, sujetas las paredes, lloras, te duele ya las manos de sujetar las paredes, ya ni puedes gritar, te derrumbas en el suelo y con la ultima lágrima en los ojos ves que realmente nada a pasado…

CONCLUSIONES

El humano siempre vivirá con miedo, superarlos o no es cosa suya pero si decide superarlos siempre habrá alguien que estará para ayudarle pero no hay que temer y contar sus miedos y así con la ayuda poder superarlos porque si intentamos afrontarlo solos podemos llegar hasta tal límites de locura que podemos acabar con el miedo de la peor forma posible que hay en este mundo y si lo haces así crearas mucha tristeza entre muchas personas que una parte de su vida se ira.



Alina~

martes, 30 de octubre de 2012

Baile de máscaras






Endsville, noche de rituales oscuros, la luna amenaza con quedarse siempre y no dejar volver al sol. Una pequeña casa en el centro de la villa, un chico joven en su habitación tumbado escuchando música, en su escritorio esta tirada sus ropas de gala, hoy va a salir. Esta llegando la hora, el chico se levanta y empieza a vestir. Se va a celebrar una fiesta en Endsville por todo lo alto, en la mansión Gárgola. El chico termina de vestirse con el son de la música, el ultimo toque k es la la mascara.

Sale a tiempo de casa y va a la esquina de la calle sombra donde quedo con sus amigos. Cuando llego todos tenían sus mascaras puestas, el chico les saludo pero ningún amigo le respondió. El chico no dio mas leña a la conversación, simplemente marcho con ellos asta la mansión gárgola, al gran baile de mascaras de ese día. Las calles ese día estaban adornadas con adornos al muy estilo halloween, todos sabían k ese día se celebraba ese baile pero unos pocos privilegiados de Endsville estaban invitados. El chico estaba ilusionado porque nunca había entrado a la mansión gárgola y tenia la esperanza de conocer alguna chica guapa porque aun tenia el vacío de la soledad en su corazón.

Llegaron a la puerta de la mansión, allí había un hombre recogiendo las invitaciones, también llevaba mascara y no hablaba. Al chico ya le estaba pareciendo extraño que nadie hablase pero pensó que así tendría mas misterio el baile de mascaras porque con un simple sonido podrías reconocer a tu mejor amiga.

Una vez dentro ve el gran salón, esta abarrotado, todos con mascaras y colores de ropas oscuras, tal y como se indicaba a los invitados en las invitaciones. El chico bajo hacia el gran salón por unas escaleras de lujo en forma de caracol mientras que pensaba que esa noche pudiera encontrar a su gran amor en ese salón. Minutos mas tarde empieza el gran baile con su primera canción, era una balada y el chico necesitaba una acompañante para bailar, miro a su alrededor y al darse la vuelta allí la tenia,no sabia quien era por su mascara pero le dio igual y la saco a bailar.

Tras unas cinco canciones mas por fin salio a escena la dueña de la mansión, se trataba de Lady Dark, era ya una mujer mayor, de unos sesenta y pico años. Se decía que Lady dark nunca salia de su mansión pero el chico la vio una vez fuera...y hablo con ella!!,nadie le creía así que olvido ese día pero en ese día paso algo extraño, el chico estaba muy mal, tenia una mala vida y se encontraba en la calle con los nudillos lleno de sangre y llorando y lady dark le ofreció un pañuelo para limpiarse la sangre y el chico se lo agradeció,no reconoció a lady dark días atrás, y se puso hablar con ella. Lady dark le pregunto al chico que le había pasado y este le respondía que hay palabras en esta vida que duelen. Lady dark no se sorprendió con la respuesta y le dio la idea de un mundo sin palabras, un mundo de gente muda por algo, el chico la sonrió y con un tono suave de voz le contesto que estaría bien un mundo así, que por tal de no oír mas esas palabras...

Lady dark salio a escena en su fiesta, parecía buscar a alguien mientras agradecía a los invitados por su presencia en su mansión. La mujer bajo del supuesto escenario y siguió buscando a esa persona tan importante por todo el gran salón.

El chico aun seguía bailando con la chica que pidió salir, la miraba mucho a los ojos, tenia unos ojos oscuros con una gran melena negra. La iba a preguntar su nombre pero pensó que mejor después del baile, no quería romper el encanto de las mascaras así que siguió contemplando aquellos ojos que le llenaba su gran hueco de soledad y siguió bailando.

Lady dark parecía disgustada al ver que no encontraba a la persona que deseaba encontrar, entre tantas mascaras no le iba a reconocer así que decidió adelantar los planes que tenia previstos hacer después de encontrar a la persona y hablarla de lo que ha hecho. Volvió al supuesto escenario y pidió que se parase la música y una vez que todos los invitados la observan esta pidió un poco mas de silencio y dijo con tono suave y amable que se despojasen de sus mascaras y vieran el rostro de su acompañante en la sombra de la mascara. La gente lo izo sin dudar y...

El chico tras oír el pedido de su amiga lady dark, gracias a ella estaba en la fiesta, se quito la mascara y a ver a su acompañante quitándosela no pudo aguantar un grito de dolor, lo que estaba viendo no podía ser, miro a todos lados y en todas las personas tenia lo mismo, no podía ser, que estaba pasando allí, al mirar otra vez al escenario se encontró que tenia enfrente a lady dark que esta a su vez esbozo una sonrisa y le pregunto que si le gustaba su obra.

Lady dark parecía contenta de encontrarse con su viejo amigo pero este estaba con los ojos salidos del miedo que tenia. Años atrás cuando se encontró con el chico y después de la conversación que tuvo con el tuvo la brillante idea de experimentar un poco a ser dios y cogió a muchos candidatos, mas bien a gente que estaba en el circulo de amistad del chico e invitarles a la fiesta pero con la intención de hacer el sueño del chico que era un mundo mudo...y así lo izo, cosió a todos los invitados, incluso el hombre de la puerta, sus bocas. Intento hacer como una especie de boceto de un mundo mudo en su salón y lo consiguió.

El chico estaba muy asustado, no podía dejar de mirar a lady dark ni a los de su alrededor, tenían todos las bocas cosidas y no sentían nada, eran como zombies, vio que conocía a la gran mayoría, estaba aterrorizado, no sabia que hacer así que salio del salón mientras oía a lady dark gritándole pero este no paro y siguió y siguió asta su casa. Una vez allí pensó que porque en ese momento diría eso, vale que oyese algo malo en esta vida, algo tan malo que le llevo hacer que se reventase los nudillos, pero no mato a nadie, solo se estuvo dando contra una pared para desahogar su ira. Siguió pensando que había palabras bonitas también en el mundo pero que el nunca escucho y escucharía porque...se corto las orejas para no volver a oír a gente desquiciada que le diera ideas y que luego se le cumpliesen..



Alina~

martes, 2 de octubre de 2012






Todo empezó una mañana…
Como de costumbre, me desperté oyendo los gritos de mi padre hacia mi madre. Mi padre es una persona que no sabe solucionar las cosas si no es a base de gritos, no tiene remedio. Por otro lado, mi madre es una persona tranquila pero vulnerable, con un solo grito de mi padre se derrumba en sus lágrimas y se esconde en algún rincón de la casa. Así son todas las mañanas en mi casa, pero ese día iba a ser algo distinto; ese día empezábamos con la mudanza, y todo gracias a la mierda de empleo de mi padre.
Ahora que ya había hecho amigos en este pueblucho, me toca mudarme de nuevo, nunca he estado mucho tiempo en cada sitio que he vivido, y nunca he podido hacer grandes amistades… Me gustaría tener más confianza en mí mismo y poder hacerle frente a mi padre, pedirle que nos dejemos de mudar, pero ni eso tengo; soy tan patético que no sirvo para nada. Desde muy pequeño, he sido criado con los gritos de mi padre, y eso ha hecho mucha mella en mí. Me robó hasta mis sueños más preciados…
Por cierto, aún no me he presentado, me llamo Nico y esta es mi historia.

Nico: Buenos días, ¿a qué vienen estos gritos mañaneros?
Padre: ¡Cállate y desayuna! No tenemos tiempo que perder; nos tenemos que ir cuanto antes a la nueva casa.
Madre: Cariño, hay tiempo de sobra, deje que desayune Nico a gusto al menos…
Padre: ¿Tiempo de sobra dices, mujer? ¡No hay tiempo! Se formará atasco y no llegaremos hasta la noche, y no me gustaría tirarme toda la tarde dentro del coche
Nico: Pero, padre…
Padre: ¡He dicho que nos vamos ya! Venga coged las maletas. Por hablar te has quedado sin desayunar, Nico, ¡vamos, ve a por tu maletas!
Nico: Lo que tu mandes, padre…

Al cabo de unos minutos bajamos ya al coche, y empezó nuestro nuevo viaje a otra ciudad desconocida para mí y en la cual no duraría más de un año. Todo esto era horrible. Nunca estaría estable en algún lado si no le hago frente a mí padre, pero no puedo, no soy nadie para hacerlo.

Padre: ¡Os lo dije! Maldito tráfico. Y todo por tu culpa Nico, eso por querer desayunar a gusto.
Nico: Sí, padre, sí…
Padre: ¿Qué has dicho?
Nico: Nada…
Padre: ¡No me contestes! Mira que te arreo una en tu cara, estúpido malcriado…
Madre: Tranquilo, cariño, si no ha…
Padre: ¡Cállate tú también! Que también tienes parte de culpa de que estemos aquí metidos… Menuda familia me ha ido tocar.
Nico: Sí… Ojalá me abandonaras en la próxima gasolinera.
Madre: Chssss… Calla Nico
Padre: He dicho que no me contestases, mocoso. Soy capaz de dejarte tirado aquí mismo si lo deseas.
Nico: Déjame.
Madre: ¡Nico!
Padre: ¡Tú lo has querido! Bájate del coche ahora mismo.
Nico: Vale…
Madre: ¡Nico, no!

Fui capaz de hacerle frente en ese momento pero ahora…Ahora estaba en medio de una carretera, solo. Sí, fue capaz de abandonarme, y mi madre sin poder ayudarme, tan débil es que no ha podido decirle nada a mi padre para que no me dejase tirado. Menuda familia tenía, pero ahora, si salgo de esta, claro, viviré como yo quiera, pero no sé por dónde empezar.
Bueno lo primero será quitarme del arcén, supongo.

Han pasado ya unas horas y sigo aquí aún. Vale, me quite del arcén y anduve un poco por el prado pero, al no saber dónde ir, me senté en la hierba y me quedé a contemplar el cielo. Dentro de unos minutos empezará ha anochecer y yo sin sitio donde refugiarme.
¡Ufff! Qué valiente fui al enfrentarme a mi padre, pero menuda mierda estoy ahora hecho. No sé qué hacer… Quiero llorar incluso, pero si lo hago me derrumbare.
¡Espera! Oigo unas voces y, que yo sepa, aún no he llegado al nivel de locura; algo esta pasando por aquí cerca. ¿Qué hago, ir o no ir? Nunca he sabido decidir las cosas por mí mismo, pero ya va siendo hora, así que iré donde oigo los gritos. Espero llegar.

Seguí tras la pista de los gritos. El día se estaba acabando, empezaba a oscurecer, no sé si aguantaría una noche solo, en medio de la nada y oyendo esos gritos que parecía que venían de alguien que ha sufrido mucho en su vida; era doloroso hasta oírlo.
No sabía lo que me podía encontrar pero igualmente iba a buscarlo, costase lo que costase.

Cayó la noche. Ahora sí que estaba asustado. No sé qué he de hacer y, la verdad, temo a la noche. Sí, eso he dicho, la temo; me recuerda a la muerte, toda negrura, y el viento frío igual que la guadaña de ésta, pero aún así no me rendiré.
Los gritos no cesan, y ya sólo me queda un sitio donde mirar: el bosque que avisté hace rato. Creo que miraré por los bordes; ya esta demasiado oscuro como para adentrarse. En caso de que tuviera que hacerlo, lo haría cuando amaneciese. No quiero perderme más de lo que estoy ya.

Me iba acercando al bosque y los gritos eran más cercanos. Me iban a estallar los tímpanos si no los paraba. Empecé a visualizar una silueta. Parecía de una niña, más o menos de mi edad, no estaba seguro. Bueno, en ningún momento desde que me bajé del coche había estado seguro, para qué negarlo.
Me iba acercando a la silueta. De ella procedían los gritos…

Nico: ¡Perdona! ¿Estás bien…?
¿?: ¡¡¡ARRRRRRRRRRRRRGGGG!!!

No dejaba de gritar, así que decidí acercarme, y cuando estuve cara a cara con la niña, no pude creer lo que veían mis ojos. Era una chica totalmente destrozada, estaba llena de arañazos y moratones, su piel era casi gris, tenía unas ojeras enormes y rojas de tanto llorar… Se podría decir que casi no era humano.

Nico: ¡DIOS! ¿Qué te ha pasado? ¿Puedes hablar?
¿?: …

No sé si podía hablar o no, pero parecía como más tranquila. ¿Sería por mi presencia? No lo sé, pero me arrodillé para verla bien la cara y secarle las lágrimas con un clinex que llevaba encima.
Ha tenido que sufrir mucho en la vida esta niña. Y yo que pensaba que era el más infeliz del mundo… Pensé mal.
Dejó de gritar, pero ahora, a lo lejos, oía unos zapatones, algo se acercaba…

¿?2: ¡¿Saray?!
¿?: Mmm….
Nico: Te llamas Saray entonces.
¿?: Mmm…

Los zapatones que escuché ya estaban aquí. Ante mi presencia apareció lo que iba siendo un hombre de unos dos metros de altura y de musculatura delgada, no le podía ver la cara, ya que todo su cuerpo estaba metido en una especie de túnica marrón, desgastada.

¿?2: ¿Quién eres? Y ¿Qué haces aquí con ella? ¡Contesta!
Nico: Y… Yo… Yo soy Nico, y estaba por aquí y oí sus gritos y me acerque haber que había pasado. No le he hecho nada malo ¡lo juro!
¿?2: Nico dices… Te esperaba. Pero ya te contaré. Yo soy mmm… JOKER. Ayúdame a llevar a Saray a su habitación, y mañana por la mañana hablamos.

No me negué a ayudarle, y más después de haber oído que me estaba esperando. No sé qué quiso decir exactamente con eso, pero estaba intrigado, y quería descubrir lo que estaba pasando y lo que me iba a pasar.

Tras meternos en el bosque, Joker me empezó a guiar hasta lo que parecía un pueblecito pequeño y algo abandonado. Llevaba a Saray en mi espalda, y parecía que se había calmado y dormido. Joker me señalo una casa abandonada del pueblecito. Con eso me quiso decir que allí vivía Saray y que fuera a dejarla allí. Cumplí su orden.
Fui hacía la casa, y cuando entré vi que estaba todo hecho una mierda, todo era horrible, lleno de telarañas, polvo, y alguna que otra rata se oía en ese ambiente tan caótico. Busqué la habitación donde dormía Saray, y cuando la encontré la tumbé en su cama y la tapé con el trozo de tela que había, porque eso no se podía llamar sábana.

Salí de la casa y enfrente me estaba esperando Joker. Me dio una señal como para que me acercase a él.

Joker: Ahora te indicaré dónde dormirás. Mañana por la mañana hablaremos en mi cabaña. Sígueme.
Nico: Vale, pero ¿qué es todo esto?
Joker: Nada de preguntas ahora. Mañana podrás hacerme todas las que quieras ¿entendido?
Nico: Vale, lo he entendido.

Joker me llevó hasta otra casa abandonada del pueblecito. Todo esto me parecía muy caótico y extraño. Me dio otra señal para decirme que esa noche la pasaría allí, y que mañana le buscase, así que, después, me adentré en la casa y busqué el dormitorio para dormir y pasar la noche cuanto antes.

Llegó la mañana, y cuando abrí los ojos ¡Menuda sorpresa! Todo había cambiado. Ahora estaba como en una especia de casa de cuento de hadas; colores de paredes muy llamativos y que parecían dulces.
Salí fuera de la habitación, y cada vez iba mas sorprendido. Todo ha cambiado de la noche a la mañana; ahora estaba dentro de un cuento de hadas… ¿Cómo puede ocurrir esto?

Salí al exterior y, para no acabar con las sorpresas, vi otro bosque muy distinto del que había visto la noche anterior. Todo parecía un cuento, y mas sus ciudadanos… Sí, había gente, y todos eran críos de mi edad o menor, pero eran raros. No sabría explicarlo, pero sus ropas no eran como las normales en las ciudades. Parecían gnomos, pero al menos parecían felices, no como Saray… Por cierto, ¿debería ir a verla?

Antes de salir del porche de mi casa, una hadita me paró en seco. Era bajita y con trenzas azuladas y con unos ojos azules cristalinos. Tenía unas pequeñas alitas, y su vestido era como una especia de traje de novia, pero con la falda más corta.

¿?: ¡BUENOS DÍAS! Eres Nico ¿verdad?
Nico: Em… Buenos días. Sí, soy Nico… Y tú eres…
¿?: Mi nombre es LUPITA, me envía Joker. Me ha pedido que te guíe hasta su casa y, después, que te enseñe el pueblo, jijiji.
Nico: ¿En serio? Bueno, pues encantado, Lupita. Vayamos a ver a Joker.
Lupita: ¡Siiiiiii! Vamos rápido para así tener luego más tiempo para jugar.

Lupita parecía una niña encantadora, pero que fuese vestida de hadita… Me daba algo de respeto, la verdad. Todo esto me parecía muy extraño, pero en unos momentos supongo que averiguaría qué esta pasando en ese pueblo tan extraño.

Me cogió de la mano y echó a correr. No tuve más remedio que correr con ella. Estaba toda ilusionada, a saberse por qué.
Nos empezamos a dirigir hacía el norte del pueblo. A lo lejos, se empezaba a contemplar una especie de mansión, pero algo fantástica. Parecía que la habían dibujado, o algo de eso. Era muy irreal.

Lupita: Joker vive aquí, así que adelante.
Nico: Muchas gracias por traerme, Lupita.
Lupita: Muchas de nadas, Nico. Yo te esperaré aquí; Joker está algo enfadado conmigo, y no quiere verme en un tiempecillo.
Nico: Pronto se le pasará, es una buena persona.
Lupita: Lo sé, pero hice algo muy malo…
Nico: Bueno, no te preocupes. Todos hemos hecho cosas malas en esta vida, y aún seguimos aquí, ¿o no?
Lupita: Siiiiii, tienes razón. Bueno, entra, si no Joker se enfadará.
Nico: Vale, ya voy. Venga, hasta luego, amiguita.
Lupita: ¡¡¡Hasta luego!!!

Cuando me despedí de Lupita entré en la mansión. Era tan irreal, que no sé qué me iba a encontrar dentro, sólo sé que Joker iba a estar allí, y que por fin vería cómo era su rostro.
Llamé a la puerta y esta se abrió sola, por arte de magia. Sinceramente, me lo esperaba. Era tan irreal todo, que creo que estoy muerto y que todo esto es mi sueño eterno.

Empecé andar por el pasillo. El pasillo estaba lleno de retratos y de armaduras; parecía el pasillo de un castillo. Al fondo vi una puerta con un gran letrero luminoso en el que ponía Joker… Qué ironía.
Me dirigí hacia la puerta, y ¡cómo no! Otra puerta que se abrió sola. Dentro de la habitación estaba Joker, pero esta vez sin esa manta encima. Ahora llevaba puesto un chaqué como de presentador de circo y un sombrero de copa. Su cara… No tenía cara, era… Bueno, no tenía piel; era un esqueleto… Pero aún así podía hablar y hacer cosas de humanos.

Joker: Buenos días por la mañana temprano, Nico, te esperaba.
Nico: ...Buenos días. ¿Qué quería de mí?
Joker: ¿Qué tal has pasado la noche?
Nico: Bien, pero, ¿podemos ir al grano?
Joker: Como quieras, sólo intentaba ser educado. Pregunta lo que quieras.
Nico: Vale… ¿Dónde estoy? ¿Por qué estoy? Y ¿qué es todo esto?
Joker: Básicamente, quieres saberlo todo, ¿no?
Nico: Sí, por favor.
Joker: De acuerdo, pues te voy a contar una bonita historia… Todo comenzó una noche como otra cualquiera. Un niño se había fugado de casa porque sus padres le maltrataban física y psicológicamente. Harto de todo eso se escapó, y algo le hizo venir hasta aquí. El bosque le estuvo llamando, y el niño vino a su llamada. Sabía que era peligroso adentrarse en un bosque, pero ya todo le daba igual, así que entró y, para su sorpresa, se encontró con todo este pueblecito escondido. Estaba asombrado, pero también observo que sólo estaba él. La voz aún le estaba llamando, así que prosiguió su búsqueda y llegó hasta está mansión. Decidió adentrarse, y una vez dentro, encontró un rótulo que le estaba señalando algo… ese algo era muy luminoso. Al niño le fascinó algo tan luminoso y, como gato curioso, lo cogió, y tras una luz algo cegadora, al niño le cambió la vida. Ahora es un tejedor de sueños…
Nico: Vaya, es una historia algo irreal, pero…
Joker: ¿Pero?
Nico: Tú eres el niño ¿verdad?
Joker: Verdad.
Nico: Lo sabía… Y ¿qué es eso de “tejedor de sueños”?
Joker: ¿No lo has notado?
Nico: ¿?
Joker: El pueblo.
Nico: ¡Ah! Eso. Observé que por la noche el pueblo es como unas ruinas y por la mañana parece sacado de un cuento de hadas. ¿Cómo es posible?
Joker: De eso se trata mi poder de tejedor de sueños; mi poder me permite darle a todo niño que hay aquí un sueño, y darle un aspecto mas glamuroso al pueblo, lo malo es que sólo puedo tener este poder por la mañana. Por la noche mis poderes no funcionan, y eso llega a ser un gran castigo.
Nico: ¿Un gran castigo? ¿Por qué?
Joker: ¿Te acuerdas de Saray?
Nico: Sí, me acuerdo de ella, pero no sé qué le habrá pasado.
Joker: Saray es Lupita, Nico. Por la mañana, con mi poder, recibe su sueño, que es ser una bonita hada, y por la noche vuelve a su estado original, que es el de la niña que hiciste callar en la noche, Nico.
Nico: ¿Qué? No puede ser. Pero si estaba hecha polvo, y ahora está tan feliz… No lo comprendo.
Joker: Es el poder. Por la noche, al no hacer efecto, les obligo a meterse en sus casas antes de que caiga el sol, antes de que se pierda el poder. Lo malo es que si no obedecen, vuelven a ver sus rostros originales y vuelven a caer en sus traumas… Aquí todos los niños han sido maltratados, Nico, todos ellos. Yo fui uno de ellos cuando era un crío, y gracias al poder puedo ayudarles, por eso estoy aquí, por eso quiero darles felicidad, porque sé lo que sienten.
Nico: Entiendo… Pero aún me falta una pregunta.
Joker: Dispara.
Nico: Yo no he sido maltratado, al menos no físicamente, así que ¿qué hago aquí?
Joker: ¡Ah! Eso. Yo te llamé.
Nico: ¿Cómo?
Joker: Nico, tú tienes un don, el don del silencio, y por eso te llamé. Has sido el único capaz de hacer callar a uno de estos niños cuando han salido de sus casas. Yo sabía que tenías ese don, y te hice llamar por el bosque, pero Saray se me escapó y, la verdad, me sirvió mejor de cebo que la llamada del bosque. Así que me gustaría pedirte que te quedases entre nosotros y que seas el guardián del silencio… Ayúdame a que estos niños sean felices, por favor, Nico.

Había abandonado a mi familia, entrando en un bosque algo extraño pero asombroso a la vez, y ahora me pedían que me quedase entre ellos. O esto es un sueño o ya he perdido completamente la cabeza y estoy inmerso en una gran locura.
La verdad que no tenía nada que perder estando allí. Aparte, así ya podía tener amigos, que era una de las cosas que siempre he querido, así que, sin pensarlo mucho, acepté quedarme allí como el guardián del silencio… Aunque no sé cómo haré mi cometido.

Cuando salí de la mansión, Lupita aún me seguía esperando para enseñarme todo el pueblecito. Cuando la vi, no me podía creer que fuera la niña que hice callar la noche anterior. Cambiaba tanto el aspecto… Pero ¿cómo sería antes de haber sido maltratada? ¿Se acordaría aún de su otra vida antes de llegar aquí? Demasiadas preguntas me surgían cuando tendría que estar divirtiéndome con Lupita ahora, así que le ofrecí mi mano y mi mejor sonrisa, y nos fuimos a ver el pueblo.

El pueblo era muy fantástico; había pastelerías y frutos secos por todos lados, hermosas flores, todo muy verde y sobrecogedor, las casas eran todas iguales. Las casas que eran diferentes eran sitios para comprar o para cubrir otras necesidades de la gente. Estaba bien pensado, porque así podías diferenciar una casa de un comercio.
El pueblo era de lo más agradable, y sus habitantes, de lo mejor que he conocido en todas las ciudades en las que he vivido, y lo mejor de todo era que el más mayor era Joker. Todos teníamos casi las mismas edades, así que no podría haber muchas diferencias de opiniones, ya que aún éramos críos y pasábamos de esas cosas.

A Lupita se la veía muy contenta, estaba muy feliz enseñándome el pueblo y comentándome anécdotas que le habían ocurrido. Después me dijo que la gustaría ir a ver cómo se iba a dormir el sol a su lugar favorito del pueblo, así que acepté.
Estaba muy a gusto al lado de Lupita, para qué negarlo.

Ya casi estaba anocheciendo, y llegó el momento de ir a ver cómo se iba a dormir el sol. Lupita me agarró de la mano con más fuerza y empezó a correr como si estuviera poseída por el diablo. Nos metimos por un callejón algo estrecho, y dimos a una parte del bosque en la que parecía la subida de un pico.
Lupita echó a correr más deprisa; quería llegar a tiempo. Hicimos zigzag entre los árboles y subimos por encima de un par de rocas, y por fin llegamos al sitio favorito de Lupita. Era una explanada que estaba por encima de todo el bosque, se podía ver casi por completo todo el pueblecito.
Empezaba a anochecer.

Lupita: ¡Mira, mira! El sol se va a descansar ya.
Nico: Sí, ya es tarde, Lupita, y pronto anochecerá. Se enfadará Joker si no estás en tu casa.
Lupita: Un ratillo más, Nico. No creo que la oscuridad me haga nada jajaja.
Nico: …

El sol desapareció, y a Lupita no le había pasado nada… Aún.

Lupita: Nico… Nico… ¿Y mis alas? Nico, ¡no veo mis alas! ¡NICO!
Nico: Calma, Lupita. Tus alas… Vamos, corre. Hemos de irnos a casa y rápido.
Lupita: Nico n… No puedo moverme, Nico. ¿Qué me está pasando?
Nico: Nada, Lupita… Nada grave. Venga, rápido, súbete a mi espalda.
Lupita: ¡ARRRRRRRRRRRGGGGGG!

El efecto de la magia había pasado; no pensé que se pasara tan rápido. Ahora enfrente de mí tenía a Saray, y no a Lupita. Estaba gritando igual que la noche en que la encontré. Sus estigmas marcados en la piel estaban brotando, y no era muy agradable verlo. No me quedó otra que cogerla como pude y bajar explanada abajo hasta el pueblo, y volver a dejarla en su casa durmiendo. Pero, con esos gritos, podría despertar a medio pueblo, y quien sabe qué ocurriría, ya que, según Joker, todos fueron maltratados, y si Saray sol ya mete estos gritos, imagínate todo un pueblo.
Antes de bajar tenía que hacerla callar. No sabía cómo, así que la abracé, y posé mi cabeza en uno de sus hombros. No creía que funcionase, pero es lo único que se me ocurrió. Para mi sorpresa, se calló y hasta me abrazó… Creo que me reconoció, porque, antes de abrazarme, me miró a los ojos y se percató de que era el chico de la otra vez. Viéndola cara a cara casi me sonrojé, ya que tenía unos grandes ojos marrones claros y una bonita sonrisa.

Tras ese emotivo momento, me la eché a la espalda y me la llevé hasta su casa. Menos mal que había dejado de gritar, porque si no ya habríamos despertado a medio pueblo y la hubiéramos tenido gorda.
En esta noche he comprendido cuál es mi trabajo. No es fácil, pero sé que me necesitan, y por eso sé que me quedaré hasta que me echen de aquí.
Dejé a Saray en su casa, y me dirigí a la mansión de Joker. Quería hablar con él.

Me encontraba enfrente de la casa de Joker. Un momento antes de entrar oí unos pequeños gritos; algo estaba pasando dentro. Tenía que entrar a ayudarle, así que entré corriendo en la mansión hasta la habitación, y allí estaba el verdadero Joker, no el esqueleto que veía a la luz del sol. El verdadero Joker era un hombre ya de mediana edad, con una barba muy poblada y los ojos rojos… Pero no estaba marcado como los demás del pueblo. Sería porque ya que era el único adulto, y el que llevaba aquí más tiempo y eso le hizo curarse totalmente, pero aún así, eso no significaba que no le pasasen otras cosas.

Nico: Joker, ¿estás bien?
Joker: Buenas noches, Nico. No, no estoy bien como puedes observar…
Nico: ¿Qué te está pasando?
Joker: Nico… Llevo mucho tiempo fuera de la realidad humana y eso me ha llevado a deteriorarme totalmente como humano.
Nico: No lo entiendo. ¿Qué quieres decir?
Joker: …
Nico: ¡JOKER!
Joker: Lo que quiero decir, Nico, es que… Me muero… Ya no puedo vivir de este modo y, aunque volviese a una vida normal, me seguiría muriendo igualmente.
Nico: Pero, si tú te mueres… ¿Qué pasara con los niños del pueblo?
Joker: Tendrán que irse, supongo. Tendrán que volver a sus antiguas vidas.
Nico: ¡NO! No puedes hacerles eso, Joker. Si volvieran a sus antiguas vidas volverían a sufrir, no puedes obligarles a que se vayan de aquí.
Joker: No hay otra forma Nico, es la única solución…
Nico: Tiene que haber otra… ¡Estoy seguro!
Joker: Nico… ¿Te puedo hacer una pregunta?
Nico: …Dime
Joker: ¿Cuál es tu sueño?

¿Mi sueño? Hacía tiempo que nadie me lo había preguntado.
De pequeño siempre decía que mi sueño era ser bombero o algo de eso, pero ahora… Ahora ¿cuál es mi sueño? Desde hacía mucho tiempo no lo pensaba, lo había perdido y todo por culpa de mi padre; tantos gritos y tanta mano dura hicieron mucha mella en mí…

Joker: Responde, Nico…
Nico: No lo sé, Joker. Hacía tiempo que no lo pensaba.
Joker: ¿Quieres un sueño?
Nico: …Sí
Joker: Entonces ¡téjelos tú!
Nico: No entiendo…
Joker: Cuando llegué aquí, yo tampoco tenía sueños, y creo que por eso encontré el poder de tejer los sueños, Nico. Creo que deberías heredar mi poder, y hacer que estos niños sigan siendo felices hasta que vuelvan a tener confianza en sí mismo, y puedan salir a la realidad de nuevo.
Nico: No sé qué hacer.
Joker: No lo pienses, hazlo y punto, Nico. Eres el candidato perfecto. Aparte, ella esta aquí.
Nico: Ella…
Joker: Hazlo, Nico.

Llegó la mañana. Hoy el sol no brillaba tan fuerte como todos los días; todo el pueblo se percató de que él había muerto. Se reunieron en el centro del pueblo para esperar a la salida del cuerpo y llevarle hacía su nueva vida… Donde quiera que fuese su alma.
Al cabo de unos minutos, las puertas de la mansión se abrieron de par en par, y una tumba de cristal decorada con adornos de madera y oro salió flotando de la mansión. Dentro estaba el cuerpo de Joker. Fue un día triste para todos.
La mañana pasó muy silenciosa en el pueblo, hasta llegada la tarde, en la cual se anunciaría el nuevo patriarca del pueblo.

Llegada la tarde, todo el pueblo estaba delante de la mansión, todos esperaban a que se volvieran abrir las puertas para ver quién iba a ser el nuevo patriarca del pueblo.
Las puertas se volvieron abrir, y apareció un chico joven con un traje de chaqué de pingüino y un sombrero de copa, parecía el mismo Joker rejuvenecido, pero todos se dieron cuenta de que no era él, sino el último chico en llegar al pueblo, Nico.
Sí, Nico heredó los poderes de Joker, y ahora tenía que hacerse cargo del pueblo, pero para eso pidió la ayuda de su amiga Lupita.

Pasaron los días, y parecía que Nico lo hacía muy bien, aunque ahora Nico ya no se hacía llamar así; se cambió el nombre por Arlequín.
Arlequín iba siempre acompañado de su amiga Lupita, que fue la primera amiga que tuvo allí. Ésta le ayudaba a orientarse y a recordarle sus deberes, con lo cual, Arlequín siempre le sonreía y le decía que sí a todo y cumplía con sus deberes.

Pasaron los años y muchos niños de los que había conocido Arlequín se fueron del pueblo, todos ellos curados de su gran espanto. Arlequín al ver la partida de estos niños se planteaba la misma pregunta; ¿Qué hacía allí? Sabía que ya era hora de partir de allí y volver al mundo real pero no se iría solo, esperaría que estuviese ya curada de su dolor su gran amor encontrado en ese pueblo, Saray. Esta aún no estaba curada del todo pero si Arlequín se lo pidiera se iría sin dudarlo, le quería demasiado.

En una noche en que las estrellas estaban más grandes de costumbre Arlequín estaba dando una vuelta de vigilancia por el pueblo y sin creerlo se encontró a su amor en el porche de su casa con una maleta, esta le sonrió y a la mañana siguiente nadie supo nada más de ellos, solo quedo como rastro de ellos una nota de despedida….



Alina~